Erica Rimlinger was scolded throughout her childhood to stop telling stories. Nevertheless, she persisted. Erica holds a master’s degree in journalism from the University of Maryland and has spent her 25-year career telling stories for clients that have ranged from nonprofit organizations to corporations, and from magazines to America’s Most Wanted.
Based in Seattle, Erica is an avid hiker and backpacker and is overcoming a fear of heights to learn rock climbing, with mixed results so far. Her favorite part of writing for HealthyWomen.org is sharing stories of women who have overcome tremendous adversity and gone on to advocate for themselves and others. Erica believes telling stories is what helps us make sense of life and all its joys and travails. She believes every woman has a story — and we should never stop telling them. You can find more of her work at www.ericarimlinger.com.
La mayoría de pruebas del colesterol usualmente miden los triglicéridos, pero estos no son un tipo de colesterol. Sin embargo, los triglicéridos se asocian a los dos tipos de colesterol: LBD y LAD. Al igual que el colesterol, los triglicéridos son tipos de lípidos (grasas) que se trasladan a través de la sangre para realizar funciones esenciales en el cuerpo. Y al igual que para el colesterol de LBD, niveles altos de triglicéridos pueden implicar riesgos para la salud cardiaca.
Nos comunicamos con la cardióloga de Nueva York y miembro del consejo de asesoría de salud de la mujer de HealthyWomen Nieca Goldberg, M.D., para conversar acerca de lo que podemos hacer para manejar niveles altos de triglicéridos.
¿En qué forma niveles altos de triglicéridos afectan mi riesgo de ataques cardiacos o accidentes cardiovasculares?
Un perfil lipídico estándar mide los niveles totales de colesterol así como de triglicéridos, pero esta cifra frecuentemente se ignora. Esto no debería ser así porque niveles altos de triglicéridos elevan el riesgo de ataques cardiacos y accidentes cardiovasculares al promover la aterosclerosis, la acumulación de colesterol y de factores inflamatorios, en las paredes de los vasos sanguíneos que suministran sangre al músculo cardiaco. Niveles muy altos de triglicéridos también se asocian a la inflamación del páncreas (pancreatitis), que es otra razón importante para mantener un control de los triglicéridos.
¿Cómo puedo saber si tengo niveles altos de triglicéridos?
No hay síntomas si tienes niveles altos de triglicéridos. Así que el primer paso es someterte a un perfil lipídico y preguntar acerca de tu nivel de triglicéridos. Niveles en el umbral alto superan los 150 miligramos por decilitro (mg/dL), los niveles altos superan los 200 mg/dL y niveles muy altos superan los 500 mg/dL.Si el nivel es mayor que 150 mg/dL, habla con tu proveedor de atención médica acerca de cómo manejar de mejor forma el riesgo cardiovascular asociado con cualquier nivel elevado de triglicéridos.
¿Debería evitar ciertos alimentos si tengo niveles altos de triglicéridos?
El primer paso para controlar el riesgo cardiovascular asociado con niveles elevados y altos de triglicéridos es analizar lo que estás comiendo. El alcohol, las grasas, los carbohidratos simples y los azúcares pueden elevar tu nivel de triglicéridos. En vez de comer alimentos que tienen niveles altos de grasas saturadas, azúcares simples y almidones, come una dieta de estilo Mediterráneo con carbohidratos complejos, tales como cereales integrales y muchas frutas, vegetales y grasas saludables tales como la omega 3. Estos son los tipos de grasa que se encuentran en pescados, aceitunas, aceite de colza o aceite de aguacate. Dietas y ejercicios que hagan perder peso pueden mejorar los niveles de triglicéridos. También es importante reducir tu consumo de alcohol.
¿Cómo puedo reducir mi nivel de triglicéridos y mi riesgo de enfermedades cardiovasculares?
Frecuentemente, si hay niveles ligeramente elevados de triglicéridos, un simple cambio dietético tal como comer más pescado es suficiente, junto con una dieta saludable y más ejercicio. Sin embargo, si tus niveles son moderados o altos, tu doctor podría pedir aceite de pescado u omega 3 de compra con receta, los cuales tienen niveles más altos de ácidos grasos omega 3 que las opciones de suplementos dietéticos sin receta. Algunos de estos aceites de pescado de compra con receta contienen ácidos grasos omega 3 denominados AIP (ácido icosapentaenoico) y ADH (ácido docosahexaenoico) y otros contienen solo una forma purificada de AIP denominada IPE (icosapento de etilo). Todos estos productos reducirán tu nivel de triglicéridos y podrían disminuir tu riesgo de pancreatitis, pero no todos reducen tu riesgo de enfermedades cardiacas, ataques cardiacos y accidentes cardiovasculares. Sin embargo, se ha demostrado en ensayos clínicos que omega 3 de venta con receta con AIP puro, denominado IPE, reduce tu riesgo de enfermedades cardiovasculares cuando se usa con estatinas, medicamentos utilizados para reducir el colesterol.
Otros medicamentos llamados fibratos pueden reducir los niveles de triglicéridos, pero no se ha demostrado que los fibratos que se usan más frecuentemente reduzcan el riesgo de ataques cardiacos o accidentes cardiovasculares.
Este recurso educativo se preparó con el apoyo de Amarin.